Jesús lleva tan metido en su corazón ese «Abba», que es Dios para él, que quiere comunicar a los hombres la gran novedad, la grata informe de que ellos incluso pueden atreverse a llamarle Triunfadorí. Y cuando Cristo se pone a concretar esa paternidad divina, la reviste de rasgos https://youtu.be/r0yxKaL1los